lunes, 27 de julio de 2020

trocitos de cuarentena II

¿Cómo peinar domar tratar rizos y ondas? ¿Cómo domar tratar callar ahogar pensamientos peligrosos?
Culpable culpable.
Todavía queda mucha hoja mucho blanco por rellenar.
He soñado que iba al Lidl con la abuela a comprar para la cena de Nochevieja. No había de nada. Parecía que comprábamos para una fiesta de cumpleaños de niños chicos.
Hay que aceptar reconocer identificar el pensamiento el sentimiento de angustia y tratar de no asustarse. Respirar concentrarse en otra cosa.
Qué curiosas son las letras. Qué locura que estos dibujos tengan un significado tan concreto preciso exacto. Y aún así hay veces que nadie te comprende. Que has usado los dibujos significantes de tal manera que sólo tú puedes disfrutar el mensaje.
Mal.
Has escrito una porquería indescifrable y egoísta. La poesía es para todas, la poesía es para los demás.
La poesía es comunista.

domingo, 12 de abril de 2020

trocitos de cuarentena I

Me gustan las historias de niñas y mujeres. Me gusta verme reflejada en las páginas que leo.
Libro espejo.
Rodillas débiles temblando nada más me despierto. Como si me dijeras que me amas por primera vez - cada mañana.
La luz de amor del sol. Yo miro hacia el mundo. ¿Olvidaré estos poemas alguna vez en mi vida? Nunca olvidaré el colegio, el polvo, la tiza, el agua, los cuadernos vacíos, las ceras de colores. La tinta en los dedos, la arcilla, la lana. La generación del 27, los verbos irregulares, las oraciones subordinadas (confieso que se me ha olvidado la sintáxis) (era la mejor de la clase).
Nunca me besaron en el colegio.
Una compañera nos enseñó los piercings de los pezones en el baño. Nos preocupamos por sus hijos. Igual la leche sale disparada como un aspersor.
"No voy a tener hijos" dijo tajante.

Estos pensamientos son escritos nada más me despierto. Ni café ni nada.

martes, 30 de octubre de 2018

Martin Roscoe - the online friend 
invisible
he doesn't know he is my friend but i follow him 
i stalk him
i wait for his comments online
i look for his comments
i look for him
i find him
i arrange a meeting
im excited 
im very excited 
it's 4.45pm
im early
i wait
is this the right place?
yes
is this the right time?
it is
5pm
5.05
5.23
can i have another coffee please?
5.37
6.01
we are closing soon
can i have one cup more?
i've just turned off the machine, sorry
it's fine
i get on the overground
Martin Roscoe didn't come
maybe he was shy
maybe it was too far
i go online 
he is offline
he is offline the next day 
and the day after
and the next
and the next
and the next
my online friend Martin Roscoe has disappeared 
can someone who has never been there disappear?
i feel numb and sad and numb and sad
i got attached to a retired man online
that sounds weird
creepy
i cry in the shower and my family come into the bathroom and watch me cry and tell me it's okay and 
hurry up we have to go
do you want to dry your hair
i want to sleep a hundred years and wake up and realise all the pain is gone
we have arrived to our destination, please make sure you take all your personal belongings with you and hope you enjoy your stay in Barcelona
i sure will

lunes, 15 de octubre de 2018

viviendo la vida adulta

Hace un año me quería morir y leía Jane Eyre.
Quiero encontrar inspiración, no la encuentro.
¿Dónde mirar, si todo lo que me rodea son sábanas mojadas, lavaplatos, teléfonos de atención al cliente? My name is Estrella, let me spell that for you. No, you got it wrong. Wrong again.
La vida de los adultos no es nada glamurosa. En absoluto. Se me salen los mocos por las orejas, no salgo de casa. Cuando nado el tiempo pasa volando. Tic, tac, tic, tac. (Dalí era un prepotente simplón que no se le ocurría una manera más original de representar el tempos fugit que con relojes deshaciendose. Venga, hombre, por favor. Chaquetero.) Nadadora olímpica, sirena, deslizarse, zambullirse, mira qué piernas. Mírame las piernas. Tócamelas. Tócame el culo. Tócame entera. Hazme el amor, hazme gritar como una perra hasta que me muera de vergüenza y de placer (siempre nos oyen los vecinos. Seguro que se mueren de envidia.) Sólo me gustan tus manos.
Devolución de impuestos.
Horarios.
Salarios.
La poesía no entiende de eso.
Tengo que ir a la farmacia.
Gap year.
What a thought, what a concept that is me now. Short course and work. I don't think I can do it anymore. Oh no. What a shame. I will survive. (Mi versión favorita es la del Dúo Dinámico).
Hold me tight.
Make me coffee and eggs. Make me scream your name, or whisper it in your ear while I pant.
That doesn't sound right.

miércoles, 6 de junio de 2018

maría 101


Buscar trabajo le generaba una gran ansiedad. Sería la falta de práctica, de costumbre. Aquella ciudad extranjera o su escasa paciencia combinada con lo intrincada que era la tarea. Una se piensa que llega allí, planta su currículum y la llamarán a las pocas horas. O así pensaba ella que funcionaba el mundo. Pero después de haberse recorrido todas las librerías de su zona sin éxito alguno, su esperanza y motivación estaba por los suelos. Suele ocurrir cuando se viene de una familia acomodada. Se fue de casa para estudiar, y la vida adulta no resultó ser tan cómoda e ideal como se imaginó. Las protagonistas de sus novelas tienen la vida en bandeja, como la tenía ella en casa. Se enamoran, trabajan en lo que las apasiona (o consiguen dedicar su vida a ello con un agradable trabajo a media jornada que las da de comer) y viven aventuras en las capitales europeas, todas inesperadas, casuales e intuitivas. Pero la ciudad es hostil y si en casa todo se presentaba sencillo y suave como un pañuelito de seda, aquí una estaba sola. Se acababa el curso escolar e iba a tener que ponerse a trabajar cuanto antes. Las facturas se la comían, llevaba semanas alimentándose de fideos instantáneos y comidas congeladas. No salía, a sus amigas les daba apuro invitarla porque sabían de su situación. Ya había pedido demasiado dinero a su familia, suficiente bochorno había pasado ya arrastrándose delante de su padre para que le hiciera alguna transferencia de más.

- ¿Y la cafetería, María? ¿No te pagan?

-Claro que me pagan, papá. Lo que pasa es que este mes no sé qué le pasa al encargado que tiene no sé qué lío con la dueña y se están retrasando. Pero en una semana o dos me han dicho que me lo ingresan. Que no me quiero retrasar otra vez en el alquiler, la casera salta a la mínima y no quiero tener problemas. Te juro que te lo devuelvo en cuanto me paguen.

-Bueno, bueno. Tú sabrás. Igual el trabajo ese no te conviene, si no son regulares con los pagos. Quéjate al sindicato o algo.

-Qué sindicato, papá, si son un café de esos independiente, que son una familia.

-Pues que te pague la familia. Que te paguen ya.

-Sí, papá, sí. Mañana vuelvo a insistir. Pero hazme la transferencia hoy por favor, que si no no me llega hasta el lunes.



Lleva casi dos meses sin trabajar en la cafetería, que tuvo que cerrar porque no funcionaba en absoluto. Va a clase, estudia mucho y saca buenas notas. Lee dos o tres libros a la semana, sonríe siempre. Todo el mundo la adora, ella sabe hacerse adorar. Tiene carisma, sería buenísima trabajando de cara al público, vendiendo lo que sea. Y eso que no es especialmente guapa, ni alta, ni delgada. Tiene un encanto que nadie sabe describir. ¿Durará toda la vida? ¿O sólo ahora que es joven y radiante?

Se vuelve a meter en internet a buscar otras librerías cercanas. Se ha empeñado en que no quiere trabajar más en hostelería, sus amigas no la entienden.

-María, tengo un amigo majísimo en un bar, buscan camarera.

-Que paso de trabajar por las noches, que me duermo.

-Pero chica, ¿tú cuánto necesitas trabajar?

-Mucho.

-Llama a mi amigo, de verdad. Con un poco de suerte empiezas mañana.

-Que no puedo con un bar, te lo prometo. Me agobio, no aguanto tantas horas de pie, no me gustan los borrachos y el olor a cerrado. No me gusta sudar.

-Le llamo.

-Que no.

-Coge el teléfono.



María se presenta en el bar el viernes a las siete. Roberto le sonríe y le enseña el lugar.

- ¿Tienes experiencia?

-Un poco. – Roberto debe notar el desinterés de la muchacha a kilómetros, pero sigue adelante.

- Bueno, no pasa nada, es facilísimo. Tienes aquí un plano de las mesas, puedes encargarte de la pista. Ya si eso más adelante veremos si te va mejor la barra.



A María lo que más miedo le da en la vida es aburrirse. No quiere crecer (¿o envejecer? ¿A qué edad deja de crecer una y comienza a envejecer? Ambos verbos sólo contienen la vocal E.) María se juzga, juzga su mente y sus palabras. Es agotador. Es estresante. Sus ideas sobre el mundo salen silenciosas de su boca pequeña, su visión sobre las relaciones sociales, los seres humanos. María piensa muchísimo, cosas que seguramente alguien ya pensó en el siglo XVIII pero que ella no ha leído aún. María no comprende el concepto de ‘comportarse en sociedad’: la cortesía, los modales, las relaciones profesionales. En general cualquier relación humana superficial. No es genuino, no es puro. No significa que odies a tu compañera de trabajo o a tu tía la hermana de tu madre, simplemente es ese intercambio vacío el que no puede comprender. Le cuesta ponerlo sobre el papel. Le cuesta explicarlo a sus amigas. Por ejemplo, la única, la verdadera forma de relación humana, la más pura, es el amor. Menuda cursilada, piensa nada más contárselo a Roberto. Pero es verdad. Es el único lugar en el que ella encuentra esperanza.

-Perdóname, me explico fatal.

-No, en absoluto, pero las personas tienen que sobrevivir, y para ello hemos creado todo este sistema social, esta estructura. Somos seres sociales, al fin y al cabo.

-Pero no me enriquece. Este sistema del que hablas. No me llena. No crezco como persona, no alcanzo grandes experiencias o conocimientos.

- ¿Y qué quieres alcanzar?

- No lo sé.

- ¿Entonces?

- Sólo digo que la vida no puede ser sólo esto. No podemos estar aquí para trabajar de 9 a 5, tener una casa en las afueras, tres niños y envejecer en la playa, con suerte. Ya sé que esto es un cliché, pero los clichés lo son por algo. Me gustaría vivir una vida como Santa Teresa de Jesús.

- ¿Perdón?

- Quiero experimentar ese éxtasis. Claro. Ya lo sé. Quiero experimentar ese misticismo, sin drogas, sin sexo, sin estar al borde de la muerte. Algo mucho más sencillo. Más puro. La infancia es pura. Por eso no quiero crecer.



Roberto mira el reloj en la mesilla.

- Vámonos a dormir.

La luz de la farola atraviesa las persianas, iluminando la mirada quieta de María, fija en el parpadeo del reloj. 3:08.

martes, 27 de marzo de 2018

He leído ya dos libros de chicas enamorándose de hombres casados. ¡Y las comprendo tan bien! Pobre ilusas y ellos lobos. Cretinos. No son noches sueltas, son aventuras, steady affair. No me rompas el corazón.
Dominique dos semanas en la Riviera francesa. Carrie un verano en Londres rodando una película, Estrella tres semanas en un pueblo italiano.
Siempre en verano y lejos de casa. Qué momento el de hacer las maletas. ¿Por qué caemos en esta trampa? Siempre son hombres grises y medio tristes y nosotras jóvenes y más bien risueñas. O mejor, luminosas. Y nos enamorámos muchísimo y ellos nos desechan y olvidan.
Deberíamos unirnos, mujeres tristes, enamoradas y rotas: todas las otras juntas y acabar con estos hombres manipuladores y hermosos que hacen que nos enamoremos hasta las trancas

Desde un escrito en mi diario una noche de luna llena en London 31 enero 2018.


Estoy enamorada de la idea del amor y me bebo una cafetera entera cada mañana. Tal vez tenga algo que ver. La lluvia sucia de la ciudad me moja la cara y es demasiado pronto para molestar a nadie con historias metafísicas. Aunque tal vez nunca sea demasiado pronto para la metafísica.
Estoy enamorada de la devoción y de la idolatría, de la entrega absoluta y del siglo XIX. Un Romeo que esté a mis pies y bese por donde piso y yo Julieta que le entregue mi alma entera. Aunque sólo sea por un ratito. ¿Estoy loca? ¿Se derrumba mi teoría feminista por culpa de mis deseos e instintos? ¿Usarían contra mí argumentos biológicos tirando por tierra las palabras de Beauvoir que repito hasta la saciedad? Perdóname Simone, perdóname Angela. Soy débil. Qué mal.
Escribo por la noche. Son las diez y media. He vuelto del teatro y estoy cansada. La luna es brillante e ilumina mi habitación. Me gustan las noches con luna brillante. No necesito lámpara, escribo bajo su luz.
La luna es romántica y me gustaría hacer el amor bajo esta luz espectral. El amor entero, no sólo los orgasmos físicos sino intelectuales. Eso es lo que busco yo. Alguien que me provoque orgasmos intelectuales. Orgasmos en la mente y entre las piernas. Al final, ¿no son lo mismo?
Eso es lo que me gusta. El compromiso y la entrega total. El compromiso es sexy. No para toda la vida, tal vez sólo para toda la noche. Pero quiero sentir que, si te preguntasen, responderías sin dudar que soy la persona con la que quieres pasar el resto de tus días. Aunque sólo lo creas en este momento. Aunque solo lo creas por unas horas.
Bebamos Vichy Catalán o ginebra. Seamos pretenciosos y cultos y hazme el amor. Ya está bien.

domingo, 7 de enero de 2018

el futuro - rambling


Hola holita. Hace tiempo que no paso por aquí y no es que esté especialmente inspirada. Duermo poco y ayer metí a un chaval en mi casa y no mereció la pena. ¿Por qué quiero vivir como en una película de adolescentes conflictivos? ¿Por qué todo tiene que ser especial para mí?
For you, everything has to be different Serafina. A sign, a miracle of some kind.
Cito a Tennessee Williams porque puedo y porque escribe hermoso. Es importante poder citar a autoras y autores y leer y conocer. Ojalá leer todos los libros del mundo. Ojalá ser ligera y ágil y astuta como un zorro o valiente como una Leona. Ojalá ser Sabana Africana y bosque tropical. Ojalá llevar la Sabana y el Sáhara en el metro, dentro de la mochila. Ojalá todo con a, todo femenino, todo nosotras.
Ya no sé ni lo que hablo. Qué miedo el futuro y que ganas a la vez. Qué bien voy a dormir esta noche (esto es el futuro).
Tengo ganas de ir a la gran ciudad y brillar y sorprender a todo el mundo, pero sobre todo soprenderme a mi misma. Qué ganas de ser agua y ser fuego. ¡Fuego fuego fuego! En el monte de Venus y yo me voy a quemar. Que digan lo que quieran, Kiko Veneno es un grande.

Mañana es el futuro (esta tarde también es el futuro). Mañana me pongo las pilas, os me lo prometo.

viernes, 20 de octubre de 2017

Caspar David Friedrich


Os voy a contar la historia de cómo me rompieron el corazón.
Es importante saber que yo era muy joven, muy joven. No tenía ni veinte años y ya tenía el corazón hecho añicos. Mi padre dice que no sería la última vez, yo espero que sí porque duele demasiado. Duele como mil puñales clavados en mi esternón, como una serpiente devorándome las entrañas, como mil ratones mordiendo los dedos de mis pies y de mis manos. Y me sentía pesada y vacía y como el caminante frente al mar de nubes de Friedrich. Me siento como el caminante frente al mar de nubes de Friedrich. Me siento sacada de una novela, de un libro de poemas de 1846 o algo así. Entiendo todos los versos de Lorca, todos, nunca había entendido tan bien la poesía. ¡Cómo me gustaría leérselos, leerle cada soneto! Ver en sus ojos que no entiende ni una palabra pero que sólo, sólo me mira a mí. Cuando me mira con esos ojos el mundo entero se para, o se cae, y yo siento electricidad y a la vez me quemo y me derrito.
El caso es que él hablaba como si le hubieran escrito un guión. Como si alguien acabara de gritar ¡acción! Mira que te lo advierten, no te dejes engañar, no sufras. Mi abuela me lo dice mucho. No sufras. Ni por la Karenina ni por nadie.
En verano parece que la gente no tiene problemas. Resulta que en verano Estrellita vivía un cuento de hadas, en un país de nunca jamás italiano en el que no había ni responsabilidades ni problemas ni consecuencias. Bebíamos trece cafés cada día, cinco botellas de vino blanco cada noche, fumábamos en el balcón y hacíamos el amor a escondidas. En la Princesa Prometida hablan de los cinco mejores besos de la historia. Yo os prometo que todos se quedaron en Italia.
Me haces sentir fuego, le decía.
Me incendias por dentro, me decía.
¡Aquí, aquí viene el pero! Había otra, otra que no le incendiaba por dentro pero que era como una madre que le guardaba en su regazo. O algo así. Supongo. Y no la dejaría ir (quiero usar el subjuntivo pero no lo consigo). Pero seguía haciéndome el amor, con los ojos, con las manos, con la boca.
El sol es el mejor planeta, le decía, es perfecto.
¿Y qué es el sol? Me pregunta.
Una estrella.

Es tan triste y ridículo. Podríamos ser tan felices pero elige torturarse y vivir en una mentira y sufrir.

I rather break myself and feeling what you have made me feel than not breaking myself at all.

¿Me he explicado? Estoy rota.




lunes, 10 de abril de 2017

no me calla ni dios

Estoy harta de callarme la puta boca para no ofender a los que nos están matando.
¿De verdad comparas la violencia sistemática que sufrimos los colectivos oprimidos con OFENDER molestar hacer de rabiar a los poderosos?
Me da VERGÜENZA y ganas de gritar de llorar de arrancarme cada pelo de la cabeza.
Nos matan nos torturan nos discriminan e invisibilizan y soy YO la criminal, la que tengo que medir mis palabras, pedir mi derecho a la vida, el de mis hermanas y mis hermanos, por favor, con buenos modales y sonriendo.
NO ME DA LA GANA.
El pacifismo es una manera de silenciar aún más al oprimido. Si hay que luchar se lucha, y creéme que hay mucho todavía por lo que luchar.
Os equivocáis de enemigo colega.